La agricultura sostenible es un motor de desarrollo económico, social y medioambiental en Brasil, especialmente en la Amazonia. En este escenario, el trabajo de Grupo BBFBrasil BioFuels( ), que desde 2008 invierte en el cultivo sostenible de la palma aceitera, la producción debiocombustibles y la generación de energía renovable.
El cultivo de la palma aceitera, materia prima del aceite vegetal más consumido en el mundo, es una práctica sostenible que no sólo recupera zonas degradadas y captura carbono, sino que genera empleo e ingresos para las comunidades locales. El cultivo de la palma aceitera es perenne y no mecanizable, lo que crea oportunidades de empleo fijo y contribuye al desarrollo socioeconómico de las regiones en las que se cultiva.
Grupo BBFPara Milton Steagall, Consejero Delegado de , la expansión del cultivo de la palma refuerza la importancia del desarrollo sostenible como medio de preservar la selva en pie y mejorar la calidad de vida de los más de 29 millones de habitantes de la Amazonia. "La clave está en recuperar las zonas degradadas y crear puestos de trabajo", afirma. Steagall también señala que la agricultura de la región septentrional, conocida por su variedad de productos como la mandioca, las judías, las nueces de Brasil, la fruta de la pasión, el cupuaçu y el guaraná, puede ampliar aún más su bioeconomía con cultivos como la palma aceitera, sin deforestar la selva nativa.
Según el ejecutivo, Brasil tiene potencial para liderar la producción mundial de aceite de palma de forma sostenible. "Necesitamos formas de mantener la selva en pie, al tiempo que proporcionamos empleo, ingresos y riqueza a la población", afirma. Grupo BBF En la actualidad, cuenta con más de 75.000 hectáreas de palma aceitera cultivadas en los estados de Pará y Roraima, lo que permite la captura de aproximadamente 800.000 toneladas de carbono al año.
Con una de las legislaciones más estrictas del mundo, Brasil permitió el cultivo de palma aceitera exclusivamente en áreas degradadas hasta 2007, siguiendo la Zonificación Agroecológica de la Palma Aceitera, establecida por el Decreto 7.172 de 2010. En investigaciones de Embrapa (Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria), se han identificado más de 31 millones de hectáreas en la Amazonia como aptas para el cultivo de palma aceitera, manteniendo la preservación de la selva nativa. Brasil es actualmente el décimo mayor productor mundial de aceite de palma, con cerca de 300.000 hectáreas cultivadas, el 85% de las cuales se encuentra en Pará.