Con sus operaciones que promueven la sostenibilidad y el desarrollo socioeconómico, BBF está entre los miembros de la Coalición Global de la OACI, una agencia especializada de la ONU.
Brasil BioFuels (BBF), empresa brasileña que opera en el sector de la agroindustria sostenible, desde el cultivo de palma aceitera en zonas degradadas hasta el comercio, la producción de biocombustibles y la generación de energías renovables, se ha convertido en miembro de la Coalición Mundial para la Aviación Sostenible de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), organismo especializado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La Coalición actúa como un foro para que sus miembros destaquen el desarrollo de nuevos conceptos, aceleren la aplicación de las innovaciones en materia de reducción de CO2 y ayuden a identificar las últimas innovaciones para presentarlas durante los eventos de la OACI con el fin de alcanzar los objetivos globales de sostenibilidad.
La empresa es la mayor productora de palma aceitera de América Latina, y para los próximos años continuará con su estrategia de sostenibilidad y desarrollo socioeconómico, incluyendo la primera biorrefinería de Brasil para la producción de Combustible de Aviación Sostenible (SAF).
"Nuestro espíritu pionero al habilitar la primera biorrefinería para la producción de este combustible renovable en el país, junto con nuestras prácticas de sostenibilidad, fueron fundamentales para nuestra participación en la OACI. Hemos conseguido salir adelante con un combustible verde, para contribuir a la descarbonización de un sector muy importante en la economía brasileña y que carece de soluciones renovables", afirma Milton Steagall, director general de BBF. La biorrefinería, mencionada por el ejecutivo, también será pionera en la producción de diésel verde (HVO) para vehículos y está previsto que comience a funcionar en 2025.
El proyecto utilizará aceite de palma como materia prima principal y tendrá capacidad instalada para producir hasta 500 millones de litros de combustible sostenible al año. El sector brasileño de la aviación consume actualmente 7.000 millones de litros de parafina de aviación al año, emitiendo unos 10 millones de toneladas de CO2 anuales.
Desde su fundación en 2008, BBF opera con un modelo de negocio verticalizado, incluyendo toda la cadena de producción, como forma de garantizar la eficacia de las soluciones propuestas y la preservación del medio ambiente, liderando importantes transformaciones en los mercados de generación de energía y biocombustibles. "Los proyectos de BBF desempeñan un papel clave en la transición de la matriz energética brasileña en varios sectores, promoviendo la descarbonización de la economía y el desarrollo socioeconómico en la región amazónica", concluye Steagall.